25 de enero de 2016

Juan Cruz Sol, un histórico de ida y vuelta.

Juan Cruz Sol fue uno de los jugadores más destacados del tránsito del Valencia de los 60 a los 70 y fue traído con 15 años  desde Elgoibar por el gran Iturraspe. Es así como se instaló en la calle Turia de la capital valenciana compartiendo habitación con su paisano Urtiaga. Confesaba que se sentía lateral derecho y, en menor medida, extremo, pues su gran fortaleza le permitía cruzar el campo como un caballo de carreras. Su debut en Primera División se produjo a los diecisiete años, algo excepcional para la época cuando Sabino Barinaga le llevó a Sevilla para empatar a un gol en su partido inaugural. No menos exitosa fue su trayectoria en la selección nacional ya que su gran mentor Kubala le asignó en exclusiva el número dos de la selección nacional y así la defendió en 28 ocasiones. Iba bien por alto y aunque 17 goles no parezcan una marca excesiva se le tuvo como un zaguero espectacular respetado en sus cruces y por la jerarquía que aportaba. Su sociedad con Aníbal convirtió a la defensa del Valencia en un muro casi inexpugnable. En su debe se anota su afición a la protesta inútil o a la petición de fuera de juego extemporánea. Ya en 1975 y tras diez años en nuestro club, con gran pesar se fue al Real Madrid, donde sumó tres Ligas a la que ya había conseguido en el Valencia en 1971. Era este por entonces el fichaje más caro del fútbol español. Tres años más tarde regresó con una rodilla que ya no volvería a ser la misma, pero sus 370 partidos con nuestra camisola, de los que 360 fueron como titular, le hicieron acreedor a seguir como  delegado del equipo ya en los despachos como grande de nuestra historia.